Caminábamos juntos, por un pequeño sendero junto a una
avenida, caía nieve, todo el lugar estaba cubierto de ella, llevábamos unos
gruesos abrigos y unas tablas de snowboarding, no se por qué, nunca eh hecho
eso, ni siquiera eh estado en un lugar así en toda mi vida, pero no le preste
atención, nos acompañaba German, mi
mejor amigo, “ella” me tomaba de la mano, y entramos a una especie de cabaña,
junto a una caja registradora, un sujeto, como de unos 60 años, nos dice:
-Vienes sola? Tiene que pagar la entrada
Con un tono de malicia y algo agresiva “ella” responde: -sola?
No ves que estoy con mi novio? Mientras me tomas el brazo.
No sabía cómo sentirme, el corazón se me salía, había dicho
eso, pero, me sentí confundido, la agresividad de tus palabras no es normal en
ella, lo ignore. Subimos al teleférico, para llegar a la montaña, nos sentamos,
y recostó su cabeza sobre mi hombro, levante mi brazo le abrase y bese su
cabeza, luego… no pasaron 4 segundo
cuando todo se desvaneció, quede en el aire y luego desperté, estaba
consciente, pero, tan rápido como abrí los ojos, los volví a cerrar para seguir
durmiendo y estar con ella.
Regrese al sueño, pero este era diferente, inconscientemente,
sabía que debía encontrarla, la estuve buscando, en una casa, que parecía un laberinto
de compleja. La veo! Me alegro, pero mi alegría se desvanece rápidamente, “ella”
esta de frente a una pared, con la cara hacia el piso, con los ojos entre
cerrados, esta triste, lo sé, lo que no se es el por qué, la abrazo, muy fuere
y le digo, casi como un susurro:
–te amo!
No reacciona, en el fondo me hago la idea de que debe ser
por algo que yo hice, pero; ¿Qué?, ¿Por qué yo? ¿Qué pude haber hecho?...
Sé que es solo un sueño, sé que estoy durmiendo, lo sé,
estoy consciente de ello, pero aún así, se me hace un nudo en la garganta, y
siento una fuerte presión en el pecho, pues nunca, ni si quiera, eh estado tan cerca
de siquiera tocarte, nunca lo eh hecho, ni si quiera para saludarte con un beso
en la mejilla. Te abrazo fuerte, me siento muy muy triste. Pero al mismo tiempo
feliz con el hecho de que te tengo en mis brazos, y casi sin vos, te digo:
-Te amo, te amo, te amo, TE AMO!
Beso su cabeza, beso su mejilla, pero parece no responder,
esta fría, con una preocupación y con un sudor frio que recorre mi espalda,
tomo su mentón, y volteo su cara hacia la mía, sus hermosos ojos, que siempre
me mantienen hipnotizado están llorosos, esta triste, me doy cuenta, su mirada
me lo dice, y exclamo por ultima vez; -te amo. Sus labios, veo que están
preparados para algo, algo que en mi vida habían pasado por mi mente, acerco
mis labios a los suyos, y de golpe, despierto otra ves.
Abro los ojos, y me molesto, odio que eso pase, pero igual, vuelvo
a cerrarlos para intentar dormir, lo consigo, pero esta vez, todo está más
borroso, más obscuro, estoy frente a una casa, en el jardín, se que ella está
en esa casa, mi casa, nuestra casa.
Entro y corro como loco, se que está en alguna parte, -AQUÍ ESTAS!
Exclamo, la abrazo de nuevo y mientras beso su cabeza repetidas veces le digo,
casi rogándole; -no me hagas esto otra vez! Te amo, demasiado, como no tienes
idea. Ella sigue indiferente, mirando el piso, consigue zafarse de mis brazos,
y sigue caminando a pasos largos y apresurados, sale de la casa y entra en la
que está justo al lado, es la casa de sus padres, deja la puerta abierta, y se deja
ver que sus padres están riendo felices, con un papel en la mano, parecía un billete
de lotería, es un momento de júbilo en su casa, en el fondo yo sabía que entro
directo a su habitación, sin intención de salir.
Me doy cuenta de que si me quedo hay mucho tiempo será en
vano, de que ella no saldrá, sus padres se salen de casa riendo, en pijamas,
con el billete de lotería en sus manos, nada tiene sentido.
Y con gran facilidad, consigo salir del sueño, como si estuviera
bajo mi control, como si yo decidiera cuando dormirme y cuando empezar y
terminar a soñar. Y otra ves, en la vida real, una vida, en la que sabes que te
amo, pero ni si quiera te lo eh dicho en persona como es debido.